Si estás buscando un lugar en el cual tus ojos puedan perderse en el horizonte y fundirse con los detalles y contrastes del paisaje ese es, sin duda, el Mirador de San Nicolás. Situado en el barrio del Albaicín, desde él podrás admirar toda la magnitud de la Alhambra y el Generalife en un marco incomparable coronado por la Sierra Nevada. Además de esto, y por si no fuera suficiente, el ambiente y el entorno en el que se encuadra hace de este un lugar muy especial: música en directo, mercadillos y varios de los mejores bares de la ciudad convierten este mirador en una parada obligatoria. Se trata, por tanto, de un lugar de encuentro entre locales y turistas en el que se intercambian culturas y puntos de vista. Difícilmente podrás olvidar los momentos vividos en él.
Este icónico mirador recibe su nombre de la Iglesia que encuentra a su espalda. La iglesia de San Nicolás fue construida en 1525 sobre los cimientos de una mezquita, al igual que otras tantas de la ciudad de Granada. Por tanto, no estamos ante un complemento decorativo del espacio, se trata de un monumento inseparable de la propia plaza y el mirador que añade un valor histórico específico difícilmente calculable. No obstante, esta no puede ser visitada por dentro ya que se encuentra a la espera de ser restaurada.
Si te animas puedes subir hasta el mirador a pie. Esta es, indudablemente, una de las opciones más recomendadas ya que permite conocer de primera mano y adentrarse en la realidad del Albaicín antes de llegar a San Nicolás y disfrutar tanto de las vistas como de un merecido descanso. Puedes llegar desde Plaza Nueva o el Paseo de los Tristes subiendo por la Cuesta del Chapiz.
No obstante, y si lo prefieres, también puedes subir usando el autobús que permite llegar fácilmente hasta el Mirador de San Nicolás utilizando cualquiera de las paradas del centro de la ciudad. Las líneas a tu disposición son la C1, C32, C33 y la C34, las cuales pasan por la Carrera del Darro, el Paseo de los Tristes y también por Plaza Nueva.
Por normal general estos autobuses suelen ser pequeños, con capacidad para unas 15-20 personas. Por ello te aconsejamos ir con tiempo suficiente para que puedas exprimir al máximo tu visita por el mirador más emblemático del Albaicín y de Granada.